Instrumentos de viento
Instrumentos de viento
Los instrumentos de viento son un tipo de instrumentos
musicales cuyo sonido se produce mediante el paso del aire a través del cuerpo
del instrumento, sin la necesidad de membranas o cuerdas vibratorias. Por
ejemplo: la armónica, el clarinete, la flauta y el trombón. El aire,
normalmente, proviene de los pulmones del intérprete, para lo cual se debe
soplar a través de una boquilla, aunque en otros casos se utiliza en su lugar
un fuelle. Los instrumentos de viento pueden funcionar como solistas o como
parte de una orquesta. Algunos de los instrumentos musicales más antiguos que
se conocen eran de viento. Su fabricación en la antigüedad involucraba huesos
de animales o cañas vegetales, y no se empleaban únicamente con fines de
entretenimiento, sino también rituales y militares. En Europa se han encontrado
instrumentos de viento de alrededor de 40.000 años de antigüedad.
Los instrumentos de viento se caracterizan, en
términos generales, por lo siguiente:
El sonido se produce por la vibración generada por el
paso del aire por el cuerpo del instrumento. Este sonido puede modificarse a
través de la modulación del flujo del aire en diferentes partes del
instrumento. Las notas se obtienen a través de la obstrucción parcial del aire,
de la variación de la longitud de la columna de aire vibrante o del uso de
distintas corrientes de aire simultáneas. Suelen estar fabricados de metal, o
combinaciones de metal y de madera. Su ejecución demanda una importante cuota
de técnica, que incluye cuestiones de la posición de la boca y la respiración.
Tipos de instrumentos de viento
Tradicionalmente, los instrumentos de viento se
clasifican en dos categorías: los instrumentos de viento metal y los de viento
madera.
Los instrumentos de metal son instrumentos de viento
en los que el sonido se produce mediante la modulación del aire en la boquilla,
es decir, a través de los labios del intérprete. Estos instrumentos, fabricados
generalmente con metales livianos, tienen sus orígenes en las caracolas y
cuernos utilizados en actos rituales y festivos de la antigüedad. Se componen
de la boquilla por donde entra el aire, un tubo cónico o cilíndrico y una campana
por donde se emite el sonido.
Instrumentos de viento madera
armonica - instrumentos de viento
Los instrumentos de viento madera son aquellos en los
que el sonido se produce a través de la vibración de las estructuras internas
del instrumento, conforme pasa el aire por su interior. El sonido resultante,
por ende, depende del tamaño del instrumento y de la obstrucción total o
parcial de diferentes orificios practicados a lo largo de su costado. Además,
el ingreso del aire en el instrumento puede darse soplando por una boquilla o
una caña, o bien a través del accionar manual de un fuelle. En sus orígenes,
estos instrumentos se fabricaban de madera, y de allí proviene su nombre.
Son ejemplo de este tipo de instrumentos de viento: la armónica, el oboe y la flauta.
Ejemplos de instrumentos de viento
Los siguientes son ejemplos de instrumentos de viento
de distinto tipo:
Flauta. Se trata del más antiguo de los instrumentos
de viento que se conocen, presente en casi todas las culturas. Consiste en un
tubo perforado, cuyas aberturas se tapan con los dedos al soplar por una
boquilla, para obtener así el sonido que se desea.
Clarinete. De gran importancia para la música del
barroco europeo, este instrumento se compone de una boquilla con lengüeta
simple conectada a una caña, a lo largo de la cual hay un conjunto de claves
metálicas para modular el sonido.
Saxofón. Se trata de un instrumento de forma cónica,
cuyo nombre rinde homenaje a su inventor, Adolphe Sax. Está dotado de una
boquilla similar a la del clarinete y un tubo largo y curvilíneo, con 23
perforaciones cubiertas por almohadillas que responden a las claves que el
intérprete activa con los dedos de ambas manos.
Oboe. Conocido desde la antigüedad, el oboe se
caracteriza por su sonido dulce y nasal. Se compone de una boquilla de lengüeta
doble y de un tubo simple sobre el cual se encuentran los orificios y las
claves, de un modo similar al clarinete.
Tuba. Creado en el siglo XIX, este es uno de los más
voluminosos instrumentos de viento metal que existen. Su cuerpo metálico
contiene un conjunto de válvulas que permiten controlar su tono, aunque el
resto del trabajo debe hacerlo el intérprete a través de la vibración de los
labios en la boquilla.
Trompeta. Probablemente el más famoso de los
instrumentos de viento metal, la trompeta consiste en un tubo cilíndrico que
inicia en una boquilla y culmina en una boca acampanada. En el centro del tubo
hay tres pistones que, al presionarse con los dedos, permiten modular la
columna de aire y así controlar el sonido.
Trombón. De proporciones levemente mayores a las de la
trompeta, este instrumento requiere sin embargo que el intérprete utilice un
tubo móvil, llamado “vara”, para alargar y achicar la distancia que recorre la
corriente de aire desde la boquilla hasta la boca acampanada.
Armónica. De pequeñas proporciones, este instrumento
consiste en un cuerpo largo de madera en el cual hay una serie de perforaciones
o “celdas”, en cada una de las cuales se inserta una lengüeta que el intérprete
debe hacer vibrar soplando con la boca. Cada uno de estos agujeros se
corresponde con una nota musical.
Acordeón. A diferencia de otros de la lista, este
instrumento musical de viento madera no requiere del aire de los pulmones del
intérprete, sino del movimiento de sus manos. El sonido se produce al acercar y
alejar las dos cajas de madera en sus extremos, para que el aire del fuelle en
el centro, y para modular cada nota se emplea una serie de teclas dispuestas en
la caja derecha.
Bandoneón. Se trata de un instrumento de lengüetas
libres, similar al acordeón, pero que en lugar de teclas utiliza botones en la
caja derecha como método para cambiar el tono del sonido. De gran complejidad,
es un instrumento popular en Alemania y la región sudamericana del Río de la
Plata.
Fagot. Emparentado con el oboe, este instrumento de
viento madera de alrededor de metro y medio de largo consiste en un tubo largo
y doblado levemente sobre sí mismo, al comienzo del cual hay una boquilla de
lengüeta doble y al final del cual hay una abertura campanada por donde emerge
el sonido.
Corno inglés. Instrumento derivado del oboe y de
sonido más grave, consta de una boquilla con lengüeta doble y un cuerpo largo y
ligeramente cónico, a lo largo del cual se hallan las claves, dispuestas de un
modo muy similar al oboe.
Trompa. También conocido como corno francés, es un
instrumento de viento metal muy versátil, formado por un tubo estrecho y largo,
enrollado sobre sí mismo, que culmina en un pabellón de forma cónica. Al inicio
de este tubo se encuentra la boquilla por donde sopla el intérprete y se
produce la columna de aire que es modulada por tres válvulas que se operan con
clavijas.
Corneta. Muy empleado en la música jazz, este
instrumento se puede describir como una trompa dotada de pistones. Su
funcionamiento es similar al de la trompeta, pero en un registro una octava más
alto. Además, es más cónico y tiene la boquilla más profunda, así que su sonido
es más profundo y oscuro.
Quena. De origen quechua, este instrumento similar a
la flauta es muy empleado en el folklore sudamericano. Se compone de un cuerpo
alargado con entre cuatro y ocho agujeros para controlar el flujo de aire con
los dedos, y una embocadura o muesca para soplar con la boca.
Gaita. Proveniente de la alta Edad Media, este
instrumento de viento funciona almacenando el aire que sopla el intérprete en
un odre o saco, para luego dejarlo salir por una serie de tubos con orificios,
y así obtener las notas musicales mediante la obstrucción con los dedos.
Clarín. También conocido como bugle o cuerno de caza,
es un instrumento pequeño, de sonido agudo y desprovisto de válvulas, por lo
que toda la modulación del sonido debe hacerse mediante los labios del
intérprete en la boquilla. Fue muy empleado en el ámbito militar a lo largo de
la historia.
Contrafagot. Pariente del fagot, aunque su sonido está
una octava por debajo, este instrumento tiene un cuerpo provisto de cuatro
codos, que le permite manejar una columna de aire de casi cinco metros. Se
trata del instrumento de sonido más grave de la familia del oboe.
Sarrusofón. Dotado de lengüeta doble en la boquilla y
un cuerpo cónico plegado sobre sí mismo, este instrumento sustituyó
antiguamente a los oboes y fagotes en el ámbito militar. Con el paso del
tiempo, sin embargo, han caído en desuso. Su cuerpo, dotado de clavijas, se
utiliza de un modo similar al del clarinete.
Órgano de tubos. Este voluminoso instrumento de
viento, similar al piano en sus formas y su dinámica de interpretación, genera
el sonido al hacer pasar el aire por una serie de tubos de diferentes
longitudes y grosores. Para ello, el intérprete debe presionar una serie de
pedales asociados a dichos tubos, dispuestos sobre una caja donde reposan los
fuelles.
Comentarios
Publicar un comentario